Como bien dice el refrán, no hay dos sin tres. Rafael Azcona, posiblemente el más grande guionista que ha dado el cine español en los últimos cincuenta años, ha fallecido a los 81 años, víctima de un cáncer de pulmón. Su nombre se une así al de otros ilustres que han desaparecido en esta última semana, como el director Anthony Minghella y el escritor Arthur C. Clarke. Azcona nos dejaba ayer lunes por la mañana, pero la noticia de su muerte no ha trascendido hasta hoy, tras ser incinerado en un íntimo funeral. Autor de libretos como los de EL PISITO, EL VERDUGO, PLÁCIDO, ¡AY, CARMELA!, LA VAQUILLA, BÉLLE ÉPOQUE, LA NIÑA DE TUS OJOS o LA LENGUA DE LAS MARIPOSAS, había trabajado con directores de la talla de Luis García Berlanga, Marco Ferreri, José Luis García Sánchez o Fernando Trueba. Su último trabajo, LOS GIRASOLES CIEGOS, aún pendiente de estreno, era una adaptación de una novela de Alberto Méndez que había escrito junto con el director de la cinta, José Luis Cuerda.
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